jueves, 12 de agosto de 2010

Drupidismo ¿secta o nueva religión emergente? (15/09/06)

Como todos sabemos -o deberíamos saber-Drupi es un dibujito de perro batata cachetudo y con cara de nada, cuyo famoso y único parlamento era paradójicamente: "soy muy feliz”. Podríamos decir que dicho sabueso inexpresivo es uno de los personajes más impunemente omniscientes del entretenimiento infantil. Su objetivo: Ser la pesadilla encarnada de un lobo canchero. Su modus operandi consiste en un complejo engranaje de perturbaciones psicológicas: si la consigna es "no despertar al tremendo perro buldog malumorado que yace dormido" en el interior de la casa del lobo, entonces Drupi ejecutará un despliegue de acciones perturbadoras al lado del perro asesino, y como no conseguirá despertarlo, apelará a un último recurso: darle con un tremendo garrote en el juanete al lobo y éste, en su afán de no despertar al buldog, aguantándose el dolor inconmensurable, se tapará la boca y se irá corriendo a gritar a la cima de una montaña. El modus operandi del lobo, frente a esta afrenta es una manifestación desesperada: intentará deshacerse del despiadado Drupi atándolo y metiéndolo en una caja fuerte con mil candados y cadenas, y a ésta a su vez metiéndola dentro de otra, y de otra al mejor estilo cajas chinas hiperbólica y barrocamente a más no poder. Luego, el ingenuo lobo, volverá a su casa y... ¿Quién le abrirá la puerta con toda la placidez del mundo? Si…Drupi!; El lobo, aturdido por la situación, nuevamente lo atará y lo tirará a un estanque lleno de tiburones y cocodrilos y cuando crea que todo acabó y vuelva aliviado a su casa, Drupi le aparecerá en un espejo y entonces nuevamente lo meterá en una caja que tirará desde un helicóptero a un volcán en erupción y cuando crea que ya es suficiente y regrese alegremente a su casa entrando en puntas de pie para no despertar al buldog y cuando abra la puerta del baño, alli estará, claro que si, Drupi nuevamente tocando histriónicamente unos platillos, y así por siempre.
Hecho el correspondiente refrescamiento de memoria, queremos decir que esto es más que aventuras animadas. Hay un patrón de comportamiento que pudimos observar en algunos ámbitos que responde a lo que llamamos "dogma drupidista".
Ponemos como referente el expediente 1: En una fiesta donde todos estábamos vestidos de civiles, había un individuo disfrazado de pirata. Además de dicha particularidad, sorprendía sobremanera su capacidad de omnisciencia. Recuerdo esta secuencia: Voy al baño, el pirata sale; salgo y el pirata va pasando por la puerta de perfil; a continuación voy a comprar puchos doblo en la esquina y aparece de frente y así toda la noche. Este ser aparecía por los rincones más insólitos, pero no sólo a mi sino a todos! (logramos darnos cuenta cuando concluimos que los tiempos de apariciones se yuxtaponían). Al terminar la fiesta un amigo me dice que vayamos a otra, que su primo estaba en el auto. Subimos y mi amigo me dice, te presento a mi primo, el primo se da la vuelta y quien era? Sí…el pirata. Y ahí me di cuenta que ese ser era el Mesías, era una clara reencarnación del dios Drupi. Me di cuenta a partir de ese momento que tiene muchos adeptos que están de incógnitos por doquier.
¿Cómo darse cuenta quién es drupidista? sencillo: revisás todos los álbumes de fotos y te vas dando cuenta q hay uno q siempre sale, por lo general está siempre de fondo, preferentemente de perfil, simulando que “justo, casualmente, iba pasando por ahí”. Encima a ese drupidista que sale en todas tus fotos nadie lo conoce.
Pero hay que estar atento porque no necesariamente tiene que ser una persona, a veces son cosas, por ejemplo, en todas mis fotos de uno de mis cumpleaños aparecía un cenicero de porcelana en forma de hipopótamo que tenia en mi casa…era siniestro ver que el hipopótamo aparecía mas que yo en las fotos, pero lo peor es que después desapareció, al tiempo de darme cuenta de este hecho, creo que se dió cuenta y se fue a drupidizar a otro cumpleaños. El drupidismo es místico, hace que las cosas inanimadas cobren vida.
La facultad está llena de ellos, mi grupo de investigación le puso diversos nombres a estos “devotos de la aparición organizada” antes de definirlos como pertenecientes al drupidismo: para-orejas, casuales, A.F.U (Asociación de Fisgones Universitarios), bizarros sin parlamento, etc. Acerca de estos últimos debo decir que constituyen una nota de color, son todos aquellos que aparecen por una puerta, miran y sin decir nada se retiran por otra puerta, a veces salen por la misma puerta por donde entraron (son los que olvidaron los preceptos del dalai Drupi, evidentemente hay algo que les impide la retención de datos). Pero en general sospechamos que en sus reuniones practican teletransportación y levitación entre otras actividades metafísicas, lo cual les permite ser omnipresentes y romper las barreras temporales y espaciales.
¿Cuáles son los lugares propicios para q un drupidista aparezca? Hay muchos: detrás de los marcos de las puertas, de las ventanas, de los árboles, de los pizarrones móviles, de los vidrios (olvidando que son visibles).
El Drupidismo está muy emparentado con el espionaje, como se habrán dado cuenta, (algunos incluso sugieren q tiene su propia banda sonora q vendría a ser persiana americana de Soda, pero no está del todo corroborado) porque esa es la idea, pasar desapercibidos para captar mas fieles. Está modalidad se manifiesta claramente en el expediente 459 de nuestra inventigación, donde consta el accionar del gran monaguillo del Drupidismo, cuyo nombre no podemos revelar porque sería antiético, al que denominaremos provisoriamente "Raíz". Una noche estábamos en un bar jugando a la botella con unos personajes anónimos de la cultura popular y nuestro querido Raíz se acercó al grupo y se metió en la ronda entre risas amigables. Su estratagema fue muy ingenioso ya que cada uno de nosotros pensábamos que alguien lo conocía pero no, era un gran manyin que salió galerosamente de la nada y se instaló. Desde ahí bautizamos esa actitud como “la gran Raíz”: meterse en un grupo haciéndose pasar por conocido de alguien, vivirlo y luego desaparecer furtivamente.
Esto, por ahora, creo que es lo q debo informar acerca de esta nueva secta o religión emergente, les dejo a su criterio esta discusión y observen mas a su alrededor, algunos drupidistas pueden ser muy dogmáticos y violentos.
Kill

4 comentarios:

juan dijo...

jajaja muy cierto, tenes mucha verdad pero tambien acordate de que drupi desea despertar al lobo dormido en desmedro del perro y esto tambien lo podriamos observar en nuestra querida facultad...no solo despertandolo sino tambien otras consecuencias jajaja tambien me suena igual que groupie jajaja saludos ceci...juanchi me gusta tu escritura

Luciano dijo...

Y está el drupi que sigue comiendo mientras todos ya se levantaron y con eso ya jode suficiente.
Yo tengo algo de drupi en las fiestas, no se por que, me transformo.

Kill Bill dijo...

Gracias Juanchi!!
Motonet! q bueno x acá! mirá, yo creo q todos somos militantes del drupidismo en algun momento, todos somos extras en la vida de los demás, no sólo los demás son extras en la vida de uno, de hecho, capaz q ese ser disfrazado de pirata pensó exactamente lo mismo de mi...es una cuestión filosófica: "el infierno son los otros"( y otros dicen lo mismo respecto a uno como "otro")
Abrazo

Luciano dijo...

El infierno son los otros, buena frase.
Y uno es su propio demonio.